En Binōme llevamos tiempo usando la inteligencia artificial como parte de nuestro trabajo diario. Nos ayuda a pensar más rápido, a visualizar ideas y a desbloquear nuevas posibilidades. Pero después de asistir al evento Build with AI de GDG Madrid, volvimos con algo más que herramientas nuevas: volvimos con una manera distinta de mirar.
Una de las charlas que más nos hizo pensar fue la de Clara de Luna, donde exploramos cómo la IA puede integrarse en procesos creativos de forma consciente, visual y con criterio. No fue una clase técnica. Fue un recorrido visual, narrativo y ético que nos dejó con ganas de seguir aprendiendo y aplicando.
Uno de los puntos más importantes fue entender que la IA no genera por arte de magia. Lo que obtienes depende directamente de cómo pedís, con qué intención, y con qué referencias visuales y narrativas lo haces.
Vimos cómo tipos de planos (como el dolly zoom, la cámara en mano o el plano subjetivo) pueden servir también para construir prompts más precisos y con sentido. No se trata de pedir “algo bonito”, sino de saber contar lo que buscás, con contexto, ritmo y emoción.
➡️ En Binōme ya usamos IA para generar visuales, testing de estilos y escenas de motion. Pero ahora queremos llevarlo más allá, integrando conceptos visuales reales en la construcción de prompts. Como si la IA fuera una cámara más, al servicio de una historia.
Modelos como Veo o Kling son impresionantes. Pero si no hay una mirada detrás, lo generado se queda en lo superficial.
La IA puede ayudarte a acelerar procesos o visualizar ideas más rápido, sí. Pero sin una intención clara, se nota. Por eso creemos que la diferencia sigue estando en el criterio, en cómo se piensan y se dirigen las piezas desde el inicio.
También se habló de los límites. De lo fácil que es hoy replicar estilos ajenos. De lo fino que es el hilo entre inspirarse y copiar.
Clara mostró casos como el de KFC 2025, donde la IA recreó un anuncio prácticamente igual al de un director real. Y compartió herramientas como Fairly Trained para saber si un modelo fue entrenado con datos legales o no.
En Binōme creemos que hacer bien las cosas también incluye esto: cuidar de dónde vienen los datos, cómo se usan, y a quién se le da crédito. La IA no exime de pensar. Todo lo contrario.
Usar planos narrativos en prompts para obtener visuales más coherentes.
Generar escenas de video con tono emocional definido desde el inicio.
Explorar estilos visuales para proyectos de branding o web antes de pasar a producción.
Mostrar ideas a clientes de forma más rápida y visual, sin perder consistencia.
Integrar IA en el proceso creativo, pero sin saltarse pasos esenciales.
Nos fuimos del evento con más preguntas que respuestas. Y eso nos parece bien.
Porque no se trata de dominar todo, sino de seguir aprendiendo con criterio.
En Binōme no creemos en usar IA “porque sí”. La usamos cuando aporta, cuando suma, cuando tiene sentido.
Y lo mejor es que esto recién empieza.
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En Binōme unimos estrategia, diseño y herramientas actuales para crear experiencias visuales coherentes y potentes.
Tecnología con intención. Diseño con propósito.
Porque lo importante no es solo lo que generas, sino cómo lo haces.
